Es para nosotros gran motivo de satisfacción enviar nuestros sinceros y afectuosos saludos con ocasión del Día Internacional de la Mujer
A aquellas Aprendices, Compañeras y Maestras que integran la Masonería. Queremos agradecer su lealtad a los valores que propugnamos y el compromiso, responsabilidad y disciplina con que enfrentan a diario los desafíos que la senda masónica señala.
Los derechos de las mujeres son iguales a los de los hombres, así queda recogido en los artículos 1° y 2° de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: "mujeres y hombres comparten los mismos derechos y libertades, y no existe distinción por cuestiones de sexo”.
La desigualdad sigue siendo una realidad en diversos ámbitos, basta con ver algunos datos: según la información de la ONU Mujeres, éstas ocupan menos de un tercio de los puestos directivos de nivel medio y alto, y en base a un informe de la Eurostat del año 2016, la brecha salarial de España entre géneros era de un 14,9%.
Nada nos impide reconocer que desde hace más de ochenta años en nuestro país han existido mujeres que cumplieron un rol de precursoras en la lucha por la igualdad de género. Dentro de este grupo podemos mencionar a:
-María de la Cruz Toledo, electa Senadora de la República, fundadora del partido femenino de Chile (1946-1954) quien dedicó gran parte de su vida a la política y la escritura. En 1946 contribuyó a la creación de las leyes que buscaban proteger a las mujeres, disposiciones que pavimentaron el camino de la ley que permitió el derecho a voto de las chilenas. Fue una ferviente defensora de la incorporación más "completa y humana" de las trabajadoras de casa particular en materia de previsión social.
-Inés Enríquez Frödden, abogada de profesión, en el año 1949, es nombrada por el presidente Gabriel González Videla como Intendenta Interina de Concepción y, en 1950, como titular, lo que constituiría un hecho histórico por ser la primera mujer en Chile en asumir esta alta responsabilidad política. Tuvo una importante presencia en la vida pública. Durante su permanencia en el Congreso su preocupación fueron los temas sociales, la probidad administrativa, la legislación para empleadas particulares, menores de edad y adultos analfabetos. Propuso modificaciones a los Códigos Laboral y del Trabajo para defender los derechos de la mujer y la maternidad. Junto a María de la Cruz Toledo fueron las primeras mujeres en ser parlamentarias. La llegada de estas mujeres a espacios que antes habían sido sólo masculinos no estuvo exenta de desafíos, pero el logro del voto femenino permitió abrir un largo camino de participación de las mujeres en la política chilena hoy.
En el Día de la Mujer, nuestro espíritu masónico converge en la gran lucha que ellas han dado. Recordemos la historia de dignidad de las trabajadoras de casa particular unidas en asociaciones y sindicatos que rompieron la barrera de la absoluta precariedad y aislamiento en que se encontraban. Y, a comienzos del siglo XX, las mujeres librepensadoras que junto a la masona española Belén de Sárraga, intelectual, periodista y feminista, se agruparon en centros femeninos en el norte de Chile buscando la verdad y cuestionando el dogmatismo clerical. Una transformación social se produjo en el siglo XX en Chile, nuestra institución formó parte de ella. Sufragistas lucharon por el derecho a voto, cuya ley fue promulgada en 1949, pero desde comienzos de siglo intelectuales, obreras y mujeres de élite trabajaron en asambleas, actos públicos, prensa escrita de mujeres, educación, literatura, artes visuales, y un sinnúmero de actividades para ofrecernos la construcción cultural que heredamos.
Anhelamos que la igualdad sea un hecho y las mujeres se puedan desarrollar en completa libertad y sin violencia en cualquier espacio. Es por eso que el Día Internacional de la Mujer cobra importancia para reflexionar sobre luchas, logros y el camino que aún queda por andar.
Gran Logia Mixta de Chile
UMAC
